¿Qué es un Sistema de Gestión Medioambiental?
Un Sistema de Gestión Ambiental es una herramienta para mejorar el desempeño ambiental y aumentar la eficiencia de una organización. Se trata de un valioso instrumento para reducir el impacto ambiental y la ineficacia sin sacrificar los beneficios.
¿Por qué implementar un Sistema de Gestión Ambiental?
El desafío para las empresas es más que evidente cuando tratamos de conseguir un correcto cumplimiento de la legislación medioambiental. Mediante la implementación de un Sistema de Gestión Ambiental su empresa puede transformar ese desafío en una oportunidad.
Un Sistema de Gestión Ambiental se basa en un ciclo de mejora continua, en el que las pequeñas acciones diarias de su negocio lograrán impulsarlo para un mayor aumento de la eficiencia.
Hay tres tipos de sistemas de gestión medioambiental: la norma ISO 14001 (sistema formal), el EMAS (Eco-Management and Audit Scheme, en español Reglamento Comunitario de Ecogestión y Ecoauditoría o sistema normalizado) y diversos sistemas informales como los programas internos o medios no documentados por la empresa.
Fases de implementación de un SGA
La implantación de un Sistema de Gestión Ambiental (SGA) implica llevar a cabo varias etapas que, a su vez, pueden desglosarse en actividades. Para garantizar una máxima eficacia es fundamental realizar una buena planificación de la implantación. De forma general, las fases una implantación de un SGA serían:
- Diagnóstico previo y Compromiso de la dirección. Sirve como punto de partida para analizar en qué medida la gestión cotidiana se ajusta a los requisitos de la norma de referencia y establecer un plan de trabajo.
- Organización del proyecto. Se planificarán los plazos de implantación y la carga de trabajo.
- Información y formación al personal. informar a todos los integrantes de la organización de los fines que se pretenden con la implantación, del grado de implicación que supondrá y de cómo afectará a cada persona.
- Documentación del sistema. Consisten en plasmar en una serie de documentos (que denominaremos procedimientos o instrucciones), la metodología de trabajo para abordar los requisitos de la norma de referencia, prevenir impactos ambientes y responder de forma adecuada ante situaciones de emergencia.
- Implantación operativa. Consiste en realizar las tareas y las actividades tal y como hemos establecido en los procedimientos o instrucciones.
- Auditorías internas. Una vez que el sistema está implantado se realiza una comprobación completa del funcionamiento de este y del cumplimiento de los requisitos de la norma de referencia.
- Revisión del sistema. Consiste en valorar la conveniencia, adecuación y eficacia del Sistema de Gestión Ambiental
El siguiente paso, si se desea obtener un certificado del Sistema de Gestión Ambiental, es iniciar el proceso de certificación, poniéndose en contacto con una entidad acreditada.
Beneficios de un sistema de gestión ambiental
Cuando el Sistema de Gestión Ambiental haya sido implementado, nos ayudará a conseguir:
- Mejora de la imagen: Creando un mayor compromiso interno ambiental y posicionando a la organización como un líder ambiental en el sector.
- Disminución de costes: Reduciendo gastos gracias a una productividad mejorada, la optimización de los procesos y la menor pérdida de producto deteriorado.
- Previsión de futura legislación: Reconociendo y asumiendo las directrices de la ISO 14001 para cumplir las futuras regulaciones ambientales según entren en vigor.
- Crecimiento sostenible: Ahorrando costes y mejorando la posición para manejar los retos futuros de mercado.
- Reducción de consumos.
- Control de residuos generados.
- Mejora continua de la organización.
- Acceso o mejora de la puntuación en licitaciones públicas.
¿Quién debe liderar el sistema de gestión ambiental para asegurar de que se cumpla?
Pese al pensamiento general de que los aspectos prácticos del cuidado ambiental van más allá de los propios individuos, debemos saber que las medidas más pequeñas pueden marcar la diferencia.
También existe un componente plural, si las organizaciones contribuyesen con su concienciación se alcanzarían grandes avances para proteger el medioambiente. Y ese es el fin de la implantación de un Sistema de Gestión Ambiental, que más que una sencilla necesidad reglamentaria, es:
- Un proceso para involucrar a las partes interesadas
- Una herramienta práctica para gestionar su impacto ambiental
- Un método para la mejora continua y crecimiento controlado
Por esto, es esencial contar con la implicación de todo el personal, liderado por la alta dirección de la organización, la cual sirve de guía y ejemplo.
Además y generalmente, con el objetivo de tener una figura de referencia del Sistema de Gestión Ambiental se nombra un responsable del Sistema, el cual establece un contado directo y continuo con el resto de departamentos o áreas para coordinar las tareas del Sistema. Esta persona también es el contacto con la dirección y el responsable de “defender” las auditorías frente a organismos de certificación y/o clientes.
¿Cómo se implementa un Sistema de Gestión Ambiental?
Existen unos pasos que debemos durante la implantación un Sistema de Gestión Ambiental:
Evaluación de la situación actual:
Conocer la situación actual de la empresa a través de un análisis para poder determinar el punto de partida de la organización e implantar el Sistema de Gestión Ambiental de manera óptima y adaptado a la organización.
Es necesario designar a un/a responsable que coordine las tareas de implantación del Sistema y que conozca las expectativas de satisfacción del cliente para asegurarse de que se cumplen, éste es el objetivo final del Sistema de Gestión de la Calidad.
Análisis de los procesos:
Conocer cómo se realizan los procesos en la empresa y el modo en que interactúan entre ellos. Al estar bien identificados podremos establecer controles e indicadores para conseguir una mayor eficiencia.
Documentación necesaria:
Pese a no ser obligatorio contar con un Manual, sí es recomendable tener información documentada relativa a procesos operacionales. De este modo, será más sencillo clarificar los procesos que se realizan en la empresa y establecer unos controles para garantizar su eficacia.
Comunicación y capacitación del personal:
Tras determinar las medidas y procedimientos a seguir, hay que notificárselos al personal con el objetivo comunicar las nuevas operativas, corregir posibles errores y definir o redefinir las funciones de cada puesto de trabajo de acuerdo con el Sistema de Gestión Ambiental. Los objetivos planteados deberán ser explicados, así como las herramientas, controles e indicadores que se van a tener en cuenta.
Implantación del Sistema de Gestión Ambiental:
Una vez estén definidas las tareas y procedimientos, y los trabajadores sean conscientes del modo de proceder en su puesto, la actividad productiva de la organización es llevada a cabo siguiendo los procedimientos establecidos.
Auditoría Interna y revisión:
Debe realizarse una primera Auditoría Interna para comprobar el grado de cumplimiento de la norma de referencia, también podremos detectar oportunidades de mejora y situaciones no deseadas. Esto nos permitirá potenciar la mejora continua de la organización y del Sistema de Gestión Ambiental. En el caso de detectarse algún tipo de desviación durante la auditoría interna se tendrán que aplicar medidas reparadoras y correctivas para solventarlas y evitar que puedan volver a producirse o extenderse a otros procesos de la organización.
También se realiza una revisión del sistema, en el que la dirección y los responsables de los departamentos analizan en desempeño de la organización y toman decisiones al respecto.
Auditoría de certificación:
En el caso de que la organización desee obtener un certificado del Sistema de Gestión Ambiental hay que realizar una auditoría de certificación realizada por una entidad externa acreditada. Si la organización cumple con los requisitos de la Norma ISO 14001, la empresa obtiene la certificación. En el caso de encontrarse no conformidades u observaciones, habrá que solventarlas en el plazo dado por la entidad para que pueda emitirse el correspondiente certificado.